Recupérate de los excesos de la Semana Santa y otras fiestas de guardar. Cuando observo a la gente en la playa, en los chiringuitos poniéndose ciegos de paella, sangría, sardinas y helados…
Hay veces que amigas mías o gente de mi familia me miran y me conocen como profesional del tema y exclaman: ¡no importa, ya lo perderé cuando vuelva!
Lo mismo ocurre en Navidad, pavo va pavo viene, turrón por aquí, cava por allá, comidas y cenas en familia, en el trabajo. Y conocidos que aunque no veías hace siglos parece que se confabulan para preparar orgías alimentarias, que ni podemos comer esas cantidades y tampoco digerirlas, con resultados catastróficos para nuestra silueta.
Y todos cuando pasaba la buena vida y venía Paco con las rebajas volvían a su rutina y como al unísono me preguntaban: ¡¡¡qué hagooooooo!!! ¡¡¡socorro, qué pintas!!! ¡¡¡necesito perder tres o cuatro kilos!!!
Como un amigo mío argentino que decía: “no sé lo que quiero pero lo quiero ¡¡¡ya!!!”.

No hay nada peor para el organismo que subir y bajar de peso.
Primero por la piel, porque que yo sepa no es chicle, por muy elástica que sea, y como todos sabemos guarda memoria y como buena rencorosa pasa factura: la flacidez.
Cada dieta que hacemos, cada pérdida de peso que comprobamos vamos perdiendo musculatura, que es el sostén y la bomba que nos sirve para quemar grasas.
Luego cuanto más dieta hacemos menos recursos tendremos para mantenernos delgados.
Y por supuesto sin olvidar que el organismo se acostumbra a las dietas y al principio pierdes con mucha facilidad; la segunda vez que intentas adelgazar ya pierdes menos y así sucesivamente.
Hasta que llega un momento en que, muerto de hambre y tomando setecientas calorías, no solo no consigues bajar peso sino que hasta puedes engordar en algunos casos.
Por eso la consabida frase de “A mí las dietas no me hacen nada…”
Os dejo una receta de una dieta fantástica que en su momento me regaló la doctora Amaya San Gil para depurar, muy indicada para después de estos excesos culinarios.
Como podéis ver el consejo de Amaya reside en cenar pronto aunque tiene un pequeño inconveniente: la mayoría de nosotros, al cenar tan pronto podemos asaltar la nevera una hora más tarde, pero para evitarlo tenemos nuestro querido tratamiento que con su sobre de noche a base de manzana nos sacia y nos elimina el apetito.
Depúrate paso a paso
1- Seguir una dieta depurativa tres días en semana a base de frutas, verduras, y proteínas no grasas, que elimina tóxicos y que llamaremos menú desintoxicante y nos puede hacer bajar medio kilo en un día.
2- El resto de los días podemos seguir una dieta sencilla.
a) Eliminar las tres P y las tres A, pan, patatas, pasta y azúcar, arroz y alcohol.
Disminuir la cantidad de aceite (una cucharada sopera al día).
b) Comer verduras (rehogadas, ensalada, a la plancha o en sopa) y carne magra, pollo, pescado a la plancha, en comida y cena.
3- No tomar postre después de la comida.
4- Comer algo cada tres horas, a media mañana y a media tarde (fruta, pera, naranja, kiwi) o embutido magro, pavo o jamón cocido desgrasado, excepcionalmente un yogur desnatado.
5- No comer A PARTIR DE LAS 8 DE LA TARDE, para no favorecer la asimilación de calorías que a partir de esa hora es mayor por las variaciones hormonales relacionadas con la insulina y el cortisol.
6- Caminar todos los días a buen paso media hora. (Al terminar hemos de tener la necesidad de ducharnos, si no, no es caminar, es ir de paseo).

Retención de Líquidos
Pero quizás esos kilos de más en tu caso tengan que ver con otro problema. No podemos confundir la obesidad con lo que vulgarmente llamamos hinchazón.
Nos pasamos la vida intentando bajar peso y muchas veces lo que ocurre es que nuestro peso es correcto, y no nos damos cuenta que lo que nos pasa en algunos casos es que tenemos dos o tres kilos de más a causa de la retención de líquidos.
Y es que la retención de líquidos equivale sin darnos cuenta muchas veces a un aumento de peso que equivale a subir la aguja de la báscula en uno o dos kilos extra. Si padeces este problema lo más aconsejable es que consultes a tu médico pues puedes ser síntoma de alguna enfermedad o patología que ignoras.
Ahora bien, si esa retención de líquidos no está provocada por un problema de salud entonces puede ser que se deba a tu estilo de vida y alimentación y por ello es necesario realizar algunas variantes en tu dieta.
Ahí van los secretos:

• Evita comidas procesadas y muy saladas; fíjate bien en la etiqueta de estos alimentos, también de los enlatados y productos como zumos y sopas de sobre. Suelen ser altos en sodio y aunque no notas que están salados este sodio puede promover la retención de líquidos.
• No agregues demasiada sal a tus comidas.
• Toma alimentos ricos en potasio como los plátanos por ejemplo, porque lo tienen pero ¡cuidado! sin pasarse ya que es una fruta que contiene muchas calorías; de hecho los ciclistas como Alberto Contador toman esta fruta para no sufrir un desvanecimiento o “pájara”.
• Consume fibra que hay en alimentos como las verduras frescas, frutas, cereales de grano entero. Te ayudarán mucho puesto que favorece una buena digestión eliminando los líquidos que tu cuerpo no necesita.
• Intenta consumir lo menos posible azúcares y todo tipo de dulces o postres. Si hay un nivel elevado de azúcar en tu cuerpo la capacidad de eliminar sodio disminuye. ¡Ah! también evita las bebidas azucaradas y con gas.
• Busca alimentos como las nueces, las semillas y las verduras de hojas verdes. Gracias a su contenido en magnesio eliminan la retención de líquidos.
• Y cómo no: el ejercicio es fundamental porque al sudar eliminas sal y líquidos.
• Por último pero más importante es beber como mínimo un litro de agua durante el día. Os recomiendo que le añadáis un tapón de este drenante natural que es algo más que un eliminador de líquidos. Es un programa de depuración auténtico que tiene tres funciones en una:
– Drena
– Depura
– Deshincha
Infórmate sobre las últimas novedades en nutrición y mejora la alimentación de tu cuerpo. Consejos de nutrición sobre alimentos o dietas en nuestra sección especializada en nutrición.
The post “Recupérate de los excesos de la Semana Santa y otras fiestas de guardar” appeared first on El Blog de Meli Camacho.